Me había hecho una idea preconcebida en la cabeza, como sería el vuelo… sería como tirarte al vacío… ¿?
La mañana previa al salto, sentía entre nervios, excitación y miedo. Esa sensación me gusta, me hace sentirme viva.
En cuanto subimos a Arangoiti, ya no había vuelta atrás… Tras preparar todo y dar dos pasos de nada, ya estábamos volando.
Que sensación, es difícil de explicar, no era como me lo había imaginado. Sientes una gran libertad, paz…
Tal vez la palabra sea felicidad, un instante de plena felicidad. Esa sensación que estás buscando en la vida, pero muy pocas veces la experimentas.
Sigo con esa emoción todavía y han pasado ya dos días. Ya tengo ganas de volver… ¿Qué clase de droga es esta?
Mila esker por un vuelo tan guapo Patxiku
Eskerrik asko Carlos zurekin eramateagatik.